El día jueves fui a ver la última entrega de la guerra de las galaxias, me pedí un día de vacaciones en la pega y fui a la primera función del día en un cine piola, el del florida center, no había mucha gente, y el sonido fue espectacular, creo que ha sido el cine con mejor sonido que he ido, me recordé que cuando fui a ver la venganza de los sith no quedé contento con el sonido del cine al cual fui a verla, reclamé, pero la película siguió escuchándose como las pelotas, después fui a otro cine a verla de nuevo, y el sonido fue igual de pésimo.
En este caso fue espectacular, el mejor sonido de la vida, como ya lo dije antes.
Fui con mi hermano, hace años que no íbamos al cine con mi hermano; yo fui la primera persona que lo llevó al cine, y después fuimos un montón de veces, y hemos visto de todo, hemos sido bastante cómplices en varios temas, en cine, en música, en algunas lecturas, en viajes. Es como un hijo hermano menor, tal vez no nos comunicamos mucho el interior, la esencia, pero ahí están los ojos, y la sonrisa, ese humor absurdo, ilógico, y nos sonreímos hasta la eternidad.
Cuando estaba a punto de empezar la película le dije a mi hermano una de las razones porque habíamos ido a ver la película, la primera función, el día del estreno, porque si mi tío Marco hubiera estado vivo hubiera ido con nosotros, en estas fechas tendría 53 años, murió a los 28 y solo se quedó con la trilogía original, no vio las otras 3, ni verá estas tampoco, o tal vez las está viendo a través de nuestros ojos, pero recuerdo que cuando yo era muy chico que él me hablaba con pasión de la película, fue el responsable de introducirme en varios tópicos, la guerra de las galaxias, el cine, la música, el quilapayún, Deep purple, led zeppelin, los jaivas.
Recuerdo que él siempre me habló que la guerra de las galaxias era 9 películas, que habían empezado con la 4, 5 y 6 que después vendría la I- II- III, y posteriormente la VII – VIII – IX, yo en esa época no me podría imaginar ese tremendo tamaño para una secuela de películas, me parecía increíble. Lo que me dijo mi tío, eso sí, que los únicos personajes que aparecerían en las 9 partes sería C3PO y RSD2, que serían la unión de todas las películas. No sé de donde habrá sacado eso, tal vez lo leyó en esas revistas que el consumía con avidez cada vez que salía algo de la guerra de las galaxias; y al ver esta séptima parte tenía razón, ahí estaban los robots.
Recuerdo que mi tío me invitó a ver el regreso del Jedi en el supercinerama del cine santa Lucía, ese cine que hoy no existe y que quedaba en alameda con San Isidro, donde hoy está Lápiz López, recuerdo que hicimos una fila por algunos minutos, y subimos al segundo piso, había más gente, pero parece que en esa época yo no había visto ninguna de las otras 2, pero igual la encontré buena. Fue una de las pocas oportunidades que fui al cine con mi tío.
Al ver esta nueva entrega de la guerra de las galaxias noté ciertas cosas que no siguen la norma, ya no aparece esa frase al inicio que decía, “hace mucho tiempo, en una lejana galaxia”. Me perdí un poco las letras de la intro ya que un pelotudo detrás de mí se le ocurrió sacar su celular con cámara con luz para grabar, el ladrido fue inmediato.
En términos generales es una entrega que está por sobre la 1 2 y 3 que hizo Lucas, esta VII reactualiza ciertas temáticas, pero hay cosas que me llamaron la atención, otra vez una estrella de la muerte, un tema ya tratado en la IV y en la VI, ahora es mucho más grande, y se alimenta del sol, eso me trajo recuerdos a Dragon Ball y su GenkiDama; además los malos cada vez más tienen una iconografía parecida a la de los Nazis, algo que era sutil en la IV V VI ahora es totalmente perceptible, no sé si querrá decir, ¿que los malos del universo siempre se parecen a los nazis?, pero las banderas, los saludos de los soldados con el brazo en alto, me confundió un poco, ¿cual es el verdadero mensaje detrás de todo?
También me pareció una película con una imagen mucho más orgánica, no tan digital como la 1 ,2 ,3; y una percepción a que en ese universo en paralelo la tendencia es que todo va a la decadencia, de esos hermosos parajes de la 1, 2, 3, y que va decayendo en la 4,5, 6, ahora seguimos más profundamente en la caída.
Han Solo es el verdadero protagonista de este película, y todo nos indica que será la última vez que aparecerá en la saga, salvo que en los coitos que tuvo con Leia haya agarrado en una de esas algunos efluvios de Jedi que le hagan aparece en hologramas, o que la caída y la herida que aparecen en el film hayan sido leves.
Creo además que la joven protagonista, que le hace la collera al nuevo sith, debe ser la hija de Luke, o no?; o si no de donde agarró la fuerza?,. o será una hija no reconocida de Leia?
Por otro lado la espada laser la puede agarrar cualquiera, y parece medio raro ver a un ex soldado imperial agarrándola y manejándola tan re bien.
John Williams en la música está a la altura, ojala que deje la música hecha antes que estire la pata para todas las secuelas que hará Disney en el futuro, y que serán millones.
Hay un guion interesante, no es simple, hay humor, hay dolor profundo, no es la mejor película que he visto en mi vida, ese lugar por el momento sigue ocupado con la trilogía original de El Señor de los anillos, versión extendida.
Qué más puedo decir?, después invité a mi hermano almorzar al Bar Nacional de El Bosque, quedaba un poco lejos, pero valió la pena, llegamos a una hora que no había nadie, y nos servimos lo que quisimos, todo gracias al gentil auspicio de ticket restaurant, lo mejor el bajativo servicio de la casa, una especie de limón con pisco, y algo más, limoncello le llaman parece, bacán. Pasaron por la mesa unas gran torobayo, unas empanadas camarón queso, un plato de carne con puré picante, más una copas de helado.
Nos fuimos en la línea 4, él se bajó para hacer combinación con la 4A, yo seguí en la 4, me puse a escuchar un disco que descubrí hace poco, unas grabaciones en vivo de Nat King Cole en París acompañado por la Big Band de Quince Jones, realmente espectacular, suena muy bien. Iba en eso, cuando noto que se ubicaba al lado mío uno de esos músicos que quieren sorprender con su arte en el metro, iba con su amplificador, su micrófono, y saliendo de Vicente Valdés, empezó a cantar, su estilo era ese de balada romántica onda Christian Castro donde los gritos ocupan un espacio fundamental, mientras más avanzaba la canción, le subía mas el volumen a su amplificador, y Nat King Cole se dio por vencido, era mucho ruido, parece que el artista quería que lo escucharan todos los últimos carros del metro, era imposible soportarlo, veo para afuera y era mi estación, tomé la caja de discos que llevaba después de pasar al correo, y le agarro el pend drive desde su amplificador, lo sacó y se lo tiro por el pasillo del metro, y le dije “me tenis chato”, no sé qué wea me dijo, me tiró un aletazo que descolocó mis audífonos, y me bajé para seguir caminando por el andén… le corté sus gritos al medio de todo….
A mí me gusta la música, pero no cualquier weon que se sube a cantar es artista, hay casos bastante buenos, el día anterior me tocó un tipo que se subió a cantar canciones de Lucho Jara, lo hacía con tanta delicadeza, y sin tanto ruido, que le di su premio, hay otra chica que me gusta que usa el pelo cortito, se sube con su guitarra y canta canciones originales, una vez conversé con ella, le dije que porque no grababa, hasta pensé en pagarle una hora en un estudio de grabación, pero no me contestó nunca el Facebook, después me la topé de nuevo, y le di una gran recompensa; también hay una sonora que hace maravillas; pero una vez me tocó un pelotudo que toca flauta traversa, tocaba yesterday, pero cuando la melodía subía tanto como para quedar fuera del rango bajaba de una la octava que estaba tocando, y después ya cuando bajaba suficiente y la melodía pedía bajar más, subía la octava, ¡!!!una pelotudez!!!, cuando terminó de tocar, le pregunté porque no la tocaba en otro tono, me dijo que ese era el tono original, le respondí que al cambiar de octava a cada rato sonaba horrible, justo era mi estación y bajé…
Pero después de un día de Star Wars, de recordarme de todo aquello, de un excelente almuerzo, no iba a aguantar que cualquier weón se pusiera a gritar al lado mío. A la chucha; llamó a boicotear a los seudo artistas del metro, sacarles el pen drive y tirárselos a la cresta, pero en el tiempo preciso, es decir justo en el tiempo para que no te agarren a aletazos, y no hacerlo tan seguido porque después te van a cachar y no te vas a salvar de la dulce venganza…
La venganza de los sith…
